Recibo las últimas estadísticas de nuestro blog,
genial no podría estar mejor, durante el último mes, 1/4 de vista a él, diablos no llego ni a 1/2 visita. Durante los últimos seis meses bueno digamos un par de ojeadas y 4/8, sólo
ojeadas porque nadie osó leer una entrada*.
Digamos que, si redondeamos las cifras a más
decentes números, pasaría de lo invisible a lo indiferente. Lo que me hace
pensar en que tal vez debería de escribir títulos más impactantes que cautiven y
arrastren con él, a manera de tsunami, al auditorio de la web y éstos desfallezcan
rendidos ante ellos, mientras sus vidriosos ojos enjugándose en sus
lágrimas, ávidos se posarían en cada letra capturada, haciéndola suya una a una,
deseando más y más letras, palabras, oraciones, frases, fragmentos, textos hasta
el cenit el delirio y yo, por supuesto convertirme en el supremo dictador de las
letras, quien decide a quien prodigar una gotas de mi celestial elixir, a la
manera de Jean
Baptiste Grenouille**suministrando su
perfume, y elevándome al rango de una divinidad. Pero para que ello ocurra me
mudo de país o me adoptan las Kardashian***, lo echaré a cara o
cruz.
Lo genial de todo esto es que, puedo disfrutar de una lectura
limpia y fácil ya que la hoja del
blog está libre de propaganda poco útil y que no necesito. Al ojear cualquier otra
página, me resulta difícil segregar cuál es la lectura oficial y la propaganda
que inunda toda la pantalla de mi ordenador, y que de cuando en cuando, aún
omitiendo la alerta de anuncios estos se plantan en ella sin mi consentimiento.
Bueno al menos he conseguido quizás cautivar
a mis únicos lectores, o en realidad receptores de mi narraciones, -mis mascotas-
mientras se acomodan a mi lado posando sus cabezas sobre sus manitas, no sé si
para escuchar cada capítulo, o solo acompañarme en mi solitario oficio.
Al parecer mis fabulaciones logran su tarea, de ser una especie de relajante de amplio espectro, de efecto sistémico que cumple muy
bien su rol, pues mis PETS ni bien se arremolinan a mi lado sus ojos empiezan a cerrarse, estoy seguro para saborearlas y disfrutarlas y hacerlas más vividas estas crónicas que les voy narrando.
Hasta que de pronto se yerguen frente a mí
y una de ellas levanta su patita y ¡zas! una descarga de su orina la dirige directo a mí y mi ordenador mientras se alejan sin chistar ni pío...
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*** Dícese de la especie y subespecies
pertenecientes a la misma familia que les pagan por hacer nada.
** Revisar literatura francesa para mayor "info".
* Dícese, en el argot bloguero a los títulos, encabezados, headers, en fin.
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