Ir al contenido principal

SOY UN SUPER HÉROE

  … Para Mis Mascotas Cuando era chiquito , crío, párvulo, infante o como quieras llamarlo quería ser un super héroe tan igual como aquellos de las tiras  comics  de las revistas que acostumbraba leer, deseaba tener super poderes, volar, luchar por la justicia y salir siempre vencedor de aquellas lides donde los malos pretendían salirse con la suya, en fin. Y también creo que, eran la aspiraciones de todos aquellos chiquillos de aquel tiempo. Eran deseos nobles, como la nobleza de los héroes protagonista que leíamos en las historietas, que mantenían a sus ciudades utópicas libres del crimen. La "tv" era algo secundario e intrascendente mientras corría nuestra niñez, más bien las correrías en los parques, en las calles y campos era nuestra exigencia, diversión y entretenimiento prioritario. Ahora, me llama la atención las declaraciones honestas de cierto niño, interrogado acerca de su héroe favorito y/o aspiraciones. Y reconoce que su máxima aspiración es llegar a conoc

LA EXTINCIÓN

 

Los neandertales vivieron hace 300 mil años y vivían como Pedro en su casa en plena edad de hielo. Dominaron perfectamente este ambiente, desarrollaban sus actividades al igual como nosotros lo hacemos ahora, hasta que las condiciones fueron insostenibles y poco a poco se fueron extinguiendo.

Y es que, para vivir por tanto tiempo bajo condiciones extremas parece difícil de aceptar. La certeza de cazar o ser casado pensamos era la norma, pero al parecer no era tal.

Dominaron el fuego por lo que es posible, que los orígenes de los primeros chefs se remonten este periodo. Por supuesto, poseían sus héroes propios a manera de estrellas, me imagino los más habilidosos e ingeniosos para la caza y la pesca, eran los admirados y respetados por grandes y chicos, los pequeños neandertalcillos los tendrían de ejemplo en sus escuelas. Las chicas neandertales apuesto que suspiraban por éstos.

Así mismo había artesanos expertos en la construcción de herramientas, también esplendidos artistas plásticos cuyo lienzo eran las paredes, donde pintaban sus usos y costumbres, como lo hacemos ahora nosotros, y lo que nosotros despectivamente llamamos cuevas, para la época eran los lugares de residencia y reunión entre cogeneres para compartir y disfrutar.

Es manifiesto el dominio de su entorno, por lo que tendrían que haberse comunicado entre ellos y, haber desarrollado ciertos códigos para vivir. Su raciocinio y grado de fraternidad eran elevados tal vez muy superiores al de nuestros tiempos, pues hay evidencia que indica que cuidaban, a sus enfermos y viejos, enterraban a sus muertos y hasta cohabitaron con los humanos modernos por cerca de 1000 años, y con los cuales se aparearon. Mi teoría, de hecho estoy seguro de ella, que la nobleza e inocencia de sus genes al combinarse con la de los humanos y ver la miseria de éstos prefirieron extinguirse que seguir el camino de estos "sapiens" nuevos.

Todo depende del ojo como lo veas, hoy en nuestro tiempo actual, todo aquello nos parce espantosamente extremo, y estoy seguro que lo mismo acontecerá con los próximos homínidos que le sucederán al hombre actual.

Para ese entonces, para aquellos seres que nos sucederán, se hablará del Homo sapiens y de nuestro entono, como primitivo y poco adelantado 

Más ahora sólo podemos especular al respecto, acaso la agricultura y ganadería ya no existan en el futuro. Vivir sobre la superficie de la tierra seria inaudito. Quizás, las colonias suspendidas en el aire serian la norma. La alimentación definitivamente será distinta. Ya no habrá grandes urbes o ciudades. Algunos órganos de la especie se atrofiarán por el poco uso, dando paso a otros más idóneos para aquellos ambientes. Y este ecosistema en el cual interactuamos, para aquellas civilizaciones, a lo mejor sea considerado, como  extremo, pues su medio ambiente de esa nueva civilización será inexorablemente diferente.

Imagino, habrá expediciones a la superficie donde vivían los humanos, para explorar nuestras formas de vida. Es posible que en estas incursiones arqueológicas, en alguna de ellas, encontraran restos más o menos preservados de alguna imagen de nuestro tiempo actual, con nuestros rostros con cubre bocas. Y las mil y una especulaciones al respecto fluirán. Los usaban las personas de aquel entonces como una forma de vestir, como muy de moda en aquel tiempo, dirán algunos expertos, dicha especulación se basará en la cuantiosa evidencia hallada por todo el mundo. Descubrirían tal vez algunos restos de mascarillas o faciales, más o menos fosilizados, pues como ahora lo desechamos en cualquier lugar, éstas, por algún azar lograrían sobrevivir hasta aquellas épocas. Quizás persistan aún sus texturas y colores. Dirán otros más osados, los usaban para cubrir sus feos rostros. Otros argumentarán, como una obligación de llevarlos consigo como una práctica religiosa o costumbre propia de su pueblo. Otros tapabocas serán encontrados en diferentes partes de la tierra a manera tambien de fósiles pre históricos. Señalaran, por la evidencia colectada, que la humanidad sufrió algún periodo de calamidad en algún periodo de su historia, un tipo de enfermedad desconocida para su tiempo, pero todo será una mera especulación sin certezas ciertas.

Se hablará de nosotros como una raza extinta, se analizará nuestros hábitos y como no pudimos desarrollar características, para hacer frente al medio cambiante, o como nuestras prácticas y costumbres fue que apresuraron la extinción del Homo sapiens.


Comentarios

Entradas más populares de este blog

El Olimpo y nuestro cielo

Cualquier parecido con la actualidad es mera casualidad El hogar donde residían las diferentes deidades antiguas era precisamente el olimpo. Y cada uno de estos dioses poseía singularidades características que los definían. De esta manera detentaban ciertos poderes sobre uno o varios elementos de la tierra. Y estas atribuciones, pues como debe ser y corresponde  a su jerarquia teocrática, las ejercian sin bridas ni contemplaciones de acuerdo a sus egoístas antojos , pues estos dioses al igual que los humanos podían, amar, hurtar, tener ira, en fin. En consecuencia, ostentaban las mismas miserias morales humanas, por lo que era muy menudo jugaban con el destino y repartían venganza entre los mortales. También estas divininades apreciaban en sumos grado todo esto de las ofrendas y sacrificios .   Cada uno de ellos, unos más que otros, poseía sus egregios templos erigidos por sus siervos, es decir, por sus fans mortales que anhelaban ser merecedores de la gracia y favor de aquellos. Y

Mi tío Benny* y su fobía legítima a la personalización de los vehículos

    “ Esto de las personalizaciones de los vehículos son cojudeces, necesitamos que el mentecato coche, cumpla cabalmente con su endemoniada función para el cual fue ideado, llevarte de un punto A, al punto B, nada más, el resto a la camisa **”  … Sí eso decía mi tío Benny * Y es lo primero que me viene a la mente, ahora que estoy en una concesionaria, y voy examinando estos modernos vehículos que año tras año nos provee el mercado vehicular, para nuestra completa satisfacción. Al parecer estos criterios que tenía mi tío Benny acerca de la única y original, función que debería satisfacer los vehículos a sus propietarios, al parecer ya no es así, son cosas del pasado, Ahora, la principal función felizmente, aún se mantiene, pero sólo es cuestión de tiempo, para que se decante, y tenga el mismo final en que acabaron los teléfonos personales , hacen de todo y muy poco de su función primigenia. Pero por ahora, estos carros además de trasladarnos, al parecer no es suficiente, debemos y

Intentando encontrar una ciudad propia

  Motivado por mi grado cada vez mayúsculo, y máximo rechazo a como la ciudad se ha transformado en un monstruo irreconocible , donde entre otras cosas, el tránsito de peatones y conductores impenitentes , resulta como un acertijo indescifrable, quizás normado por la supresión de cualquier sentido práctico o común de una convivencia racional, y que sólo es superada por reestrenadas primigenias formas de sobrevivencia, a costa de todo y de todos, en fin.Quisiera dejar de lado todo esto e iniciar una nueva ciudad, o cuando menos un feudo particular y privado, basado en mis particulares estándares de disfrute personal.   E n esta ciudad ideal y autogenerada por mí mismo, no pago impuestos , ni de hecho me los despojarían, ni los buenos ni los malos. No hay jerarquías burocráticas de ninguna letra, ni nivel, como las fácticas de carne y hueso, que tratan de esquilmar mis bolsillos. Puedo segregar a mis vecinos , a los no tan vecinos, así como a mis amigos y enemigos. En esta particu