LA INTRUSIVA PROPAGANDA
Es
la propaganda intrusiva de la red, que me saca de quicio, por más que quiero omitir,
no hay manera de hacer aquello, se planta y vuelve aparecer una y otra vez, he
llegado a creer que tal vez sea como un karma instantáneo, que se está vengando
de algún desplante u oprobio mío en esta vida, o en cualquiera de mis
anteriores si acaso las tuve, y ahora estoy en sus manos represivas, sujeto a su libre albedrío.
Recobrada
mi atención en la ventana gráfica del ordenador, trato nuevamente de abstraerme y volver al camino digital. Cuando creía
olvidado estos cortos interruptus, y me percibo embebido y en comunión en
un solo cuerpo, entre la pantalla del ordenador y yo, nuevamente, cual intrusos
endemoniados, la publicidad reaparece sin contemplación y por más que trato de
cliquear como loco para evitar su irrupción, es inútil, toda acción que realice
es vana, no definitivamente, no estoy en control sobre aquello.
Recuerdo
cuando apareció la "tv" paga, te la vendían como alternativa a la "tv" abierta y en
la cual te prometían y re-juraban que, en este nuevo formato de "tv", te olvidarías
de las odiosas cuñas y todo tipo de spot publicitario, y cegado por estos
geniales castillos de naipes que me pintaron y cual incauto párvulo inocente, me
matriculé como miembro pleno, para disfrutar estas nuevas experiencias de ver
cualquier mentecato programa, pero libre al fin, de cualquier odioso comercial
publicitario.
Pero
no pasó mucho tiempo de aquello para que, todo quedase guardado en el baúl de
los deseos. Y en esa nueva plataforma, hasta se tornaron totalmente, arbitrarios, abusivos y tiranos, en
el uso y sobre abuso de cualquier cuña publicitaria, sin control ni mesura,
pues de aquellas que se liberaba cada cierto tiempo, pasó a emitirse a cada instante.
Luego
me aconsejaron migrar a sus nuevas interfaces, dijeron que sería muy plena mi experiencia, y que según su
propia pauta publicitaria, afirmaron que en estos nuevos entornos, sí en verdad, no habría interrupciones de
ningún tipo, y podría disfrutar de la programación como Dios manda. Sólo con
una insignificante condición, la de abonarles un dinerito adicional. ¡Diablos y
demonios consumistas! pero resulta que esta nueva forma de ver "tv", es aún más onerosa que las precedentes. Todo esto me da la impresión que se está tornando como en una estructura piramidal, pero al revés, donde más pagas más
propaganda recibes.
Yo
creía ingenuamente que, en la red, dado que sus algoritmos digitales intrusivos,
saben al revés y al derecho sobre mis desintereses, en consecuencia, lo que más
odio son las cuñas publicitarias en cualquiera de sus formas y variantes, entonces pensé que estos fríos algoritmos tendrán en cuenta mi poco afecto al espectro publicitario, pero
al parecer no. Ignoran y le tienen sin cuidado mis gustos y demandas. En este punto, estoy contemplado
afiliarme a una genial y nuevita“app” que está de moda, me promete con sangre, y vuelve a re-jurar
que, haciendo uso de su plataforma me olvidaré de las benditas cuñas publicitarias digitales,
claro siempre y cuando les haga llegar un dinerito.
Pero
conociendo cómo funcionan estos sistemas y dado a que los algoritmos de la red
se han empeñado en hacer de mí, un objetivo o target militar, sólo atino a sonreír y
cerrar mi ordenador para ir a ver purita publicidad en mi "tv" paga.
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