... Ante la evidente imposibilidad de lograr que cualquier texto sobre ciencias duras o blandas y, otras materias relacionadas con la academia formal, llegue a la mayoría de la gente, para que de algún modo todo este conocimiento generado no se pierda en el olvido y cumplan con algún otro objetivo, aparte del muy noble que se los concibió, como apolillarse en los anaqueles de las bibliotecas de las universidades, de los institutos y en fin, de cualquier otra institución académica. Entonces, es hora de repensar en nuevos formatos para dar paso a una eficiente y vasta divulgación. Cualquier documento científico o formal, en general, sigue ciertas pautas básicas y estrictas basado en la formalidad y rigor, en consecuencia, también la redacción y su formato de presentación responde a dichos parámetros. Se trata entonces, de buscar un vehículo más amigable para utilizarlo como contenedor, y este contenedor que recoge el conocimiento, tiene que romper con los viejos esquemas, para o...
No se refiere a una fecha determinada,
específica, especial, que alude como por ejemplo, el desembarco en Normandía, o
un día parecido, sólo se refiere a la conmemoración que se hace diariamente, no
estoy muy seguro, pero creo que, se rememora a todo y a todos en estas generosas tierras.
Diablos, acaso no hay un día libre que no se
recuerde a nada, creo que no.
Todo el calendario se halla cubierto, en el
que se recuerda a alguien, alguna profesión, u oficio, a una o todas y cada una
de sus ramas o sub especialización de éstas, así tenemos entre otros, el día de
la papa, el del camote, del pollo a la brasa, el día del amigo, el día de la suegra, en fin, Y por
qué no. Todo y todos tienen derecho a que se les rememore, lo único de malo que
veo, dado a la gran demanda, pues hasta nuestros artículos de uso diario como
la bici, exigen su día, es que falte días al calendario, para cumplir con todo
y así todos felices y contentos.
La única solución que se me ocurre es
segmentar los días, y en específico las horas, es decir, cada solicitante, ya
no tendría su día en específico sino, su hora definida.
Sólo así cubriríamos todas las demandas y
peticiones, y las solicitudes serían satisfechas. De esta manera, tendríamos la
hora de tal o cual cosa. Eso sí, el Prime Time estaría reservado
exclusivamente para lo más relevante o notable.
Y si el continuo mercado de postulaciones continúa,
pues qué demonios, celebremos todo lo que se nos ocurra, la última opción que
nos queda, es hacerlo rotativo.
En consecuencia, sería usual tal vez en un
cercano futuro, una plática como esta:
- Oye viejo, ¡cuándo se celebra tu día o
perdón tu hora!
- ¡Bueno viejo, me toca de aquí a 3 años,
la sexta hora después de conmemorar la hora del plátano... Y tú hora pa,
cuándo…?!
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