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SOY UN SUPER HÉROE

  … Para Mis Mascotas Cuando era chiquito , crío, párvulo, infante o como quieras llamarlo quería ser un super héroe tan igual como aquellos de las tiras  comics  de las revistas que acostumbraba leer, deseaba tener super poderes, volar, luchar por la justicia y salir siempre vencedor de aquellas lides donde los malos pretendían salirse con la suya, en fin. Y también creo que, eran la aspiraciones de todos aquellos chiquillos de aquel tiempo. Eran deseos nobles, como la nobleza de los héroes protagonista que leíamos en las historietas, que mantenían a sus ciudades utópicas libres del crimen. La "tv" era algo secundario e intrascendente mientras corría nuestra niñez, más bien las correrías en los parques, en las calles y campos era nuestra exigencia, diversión y entretenimiento prioritario. Ahora, me llama la atención las declaraciones honestas de cierto niño, interrogado acerca de su héroe favorito y/o aspiraciones. Y reconoce que su máxima aspiración es llegar a conoc

Vacuna contra mi estupidez

 

Hasta ahora no hemos podido idear, manufacturar, algún medicamento, alguna pastillita o cuando menos una vacuna, descubrir alguna hierbita, brebaje, pócima o infusión, para que mediante su ingesta directa o indirecta, pues, evite que  incurramos en los mismos errores una y otra vez, día a día, año a año, a lo largo de la vida, y de nuestra historia.

Sólo se necesita de un breve periodo de tiempo que trascurra para que, la memoria colectiva o individual, aflore como amnesia perpetua, y las sombras del pasado asomen al presente como si aquello nunca hubiéramos pasado o experimentado.

Y si examinamos a través del tiempo nuestra historia individual o como una extensión nuestra, es decir, como sociedades plenamente racionales, resulta en un continuo proceso de repetir precisamente aquellos errores, que deberíamos evitar. Parece ser una constante, como un defecto incorregible. Tal vez se olvide por lapsos más o menos cortos o largos, pero lo que resulta perenne es, ese “deja vu” inexorable. Acaso el bordón, que indica, "es en la repetición es donde se encuentra el buen gusto" ¡Diablos y demonios iterativos! pero sólo aplicamos ello para las cosas negativas y muy poco o nada para hacer lo opuesto.

Se podría pensar que es propia de sociedades o individuos que pertenecen a castas con insuficiente desarrollo humano, pero al parecer ello no es así, pues en nuestra aldea global siempre habrá individuos, y lo que es peor, masas de seres en pleno y cabal ejercicio de todas sus facultades, que incurran, sigan y hasta veneren estas estupideces globales.

Sería genial inventar una especie de vacuna que actúe a nivel genético, para enmendar y corregir estos genes que están agazapados y al acecho de una oportunidad para exponerse o revelarse.

Ya sea en temas de, salud, economía, política, religión, social, en fin, no hay actividad humana que esté dispensada de tales taras.

Dado a que hasta ahora ello es imposible, quizás seguiremos asistiendo a un continuo y perpetuo tropiezo de los mismos yerros.

Por lo que, como para no desentonar con nuestras viejas inclinaciones, iniciaré mi propia cofradía y más aún, con el auge de las plataformas digitales de comunicación que han acentuado más dichas taras, estoy seguro, tendré un auditorio cautivo, dispuesto cuando menos si no a seguirme, a escuchar y hasta comulgar con cuanta idea, teoría peregrina se me ocurra, hasta que otro(s) me subroguen por otras, aún peores.

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