Quedarse sin red es lo peor que podría pasar en casa, todos salen despavoridos de sus rincones a ver qué es lo que ha pasado. Y es que la señal de la red en casa, últimamente se está volviendo más y más inestable. De manera que, mi mujer encargada de todos los procedimientos legales de filiación con la empresa proveedora del servicio, en consecuencia, es la delegada de activar y gestionar los protocolos de emergencia burocráticos, que haga posible de manera inmediata y efectiva que nuestra red vuelva a la vida, y que nuestras vidas no sucumban ante el caos. Recuerdo, hace algunos lustros atrás, cuando la red estaba en sus inicios, los sistemas de seguridad eran prácticamente inexistentes por lo que durante mucho tiempo accedimos en casa, a la red de una empresa vecina colindante, de manera que, usufructuábamos de este servicio gratis en toda la casa, sin pagar un chelín. Pero los años pasan y todo cambia, ahora hay ciertos códigos o claves encriptadas que hacen que tu red sea e
Hasta ahora recién me entero que, en la red también se dispone de cazatalentos virtuales. Sé ahora, de la noble, desinteresada, desprendida, y sacrificada existencia de supuestos reclutadores que escudriñan nuestras hojas de vida descargadas a las redes. Y al parecer, toda esta info antes que llegue y sea valorada por la empresa contratante en cuestión a la cual te postulaste, ellos, son el primer y tal vez el único filtro a superar. No logro entender por qué las mismas empresas no evalúan, y tasan la documentación de los postulantes y se valen de una intermediación, y es que acaso, estos reclutadores virtuales realmente saben qué tipo de talento humano apetece y necesitan ellas. O son una especie de consejeros que le susurran al oído y le dicen, éste es el mero mero, es el tipo que necesitan ya mismo. Y lo que menos entiendo, es por qué no califico a ninguna empresa pese a mis estudios universitarios, de postgrado, y algún cursito en el extranjero. En este punto, al parecer no c