... Ante la evidente imposibilidad de lograr que cualquier texto sobre ciencias duras o blandas y, otras materias relacionadas con la academia formal, llegue a la mayoría de la gente, para que de algún modo todo este conocimiento generado no se pierda en el olvido y cumplan con algún otro objetivo, aparte del muy noble que se los concibió, como apolillarse en los anaqueles de las bibliotecas de las universidades, de los institutos y en fin, de cualquier otra institución académica. Entonces, es hora de repensar en nuevos formatos para dar paso a una eficiente y vasta divulgación. Cualquier documento científico o formal, en general, sigue ciertas pautas básicas y estrictas basado en la formalidad y rigor, en consecuencia, también la redacción y su formato de presentación responde a dichos parámetros. Se trata entonces, de buscar un vehículo más amigable para utilizarlo como contenedor, y este contenedor que recoge el conocimiento, tiene que romper con los viejos esquemas, para o...
Antes al igual que hoy la práctica de comprar fiado , hoy es toda una institución, pero a diferencia de la pretérita, la cual estaba basada en la confianza generada por la asiduidad y fidelidad en la compra, y cuyo único objetivo era sacarte de un aprieto. Esta nueva se basa en esa enorme veta interna, de explotar y exprimir en sumo grado mi anhelo y mi insatisfacción de poseer o gozar de algún bien o servicio, que lo hacen parecer, eficientemente, como una oportunidad única de alcanzar estos, no obstante, tengo la certidumbre que en todos y cada uno de estos casos son siempre irrelevantes. ¡Diablos!, me llaman por teléfono a cada instante, la bandeja de entrada de mi correo, rebosa y florece por las mágicas y generosas ofertas que las muestran cómo, únicas, limitadas y hasta exclusivas y, que según me re-afirman, han sido confeccionadas y generadas sólo para satisfacer y garantizar mi estatus en esta sociedad. Si estas tarjetitas de fiado *, están esperando por mí. Y ¡diablos ...