Quedarse sin red es lo peor que podría pasar en casa, todos salen despavoridos de sus rincones a ver qué es lo que ha pasado. Y es que la señal de la red en casa, últimamente se está volviendo más y más inestable. De manera que, mi mujer encargada de todos los procedimientos legales de filiación con la empresa proveedora del servicio, en consecuencia, es la delegada de activar y gestionar los protocolos de emergencia burocráticos, que haga posible de manera inmediata y efectiva que nuestra red vuelva a la vida, y que nuestras vidas no sucumban ante el caos. Recuerdo, hace algunos lustros atrás, cuando la red estaba en sus inicios, los sistemas de seguridad eran prácticamente inexistentes por lo que durante mucho tiempo accedimos en casa, a la red de una empresa vecina colindante, de manera que, usufructuábamos de este servicio gratis en toda la casa, sin pagar un chelín. Pero los años pasan y todo cambia, ahora hay ciertos códigos o claves encriptadas que hacen que tu red sea e
Han reparado en algún programa culinario por la tv , en especial donde los críticos o jurados tienen la tarea de evaluar los platillos que les presentan para su examen y cata. Diablos, me pregunto, acaso en realidad sus papilas gustativas perciben todos esos sabores, texturas, perfumes y toda esa gama espectacular de cuadros, detalles y descripciones que hacen al respecto y nos lo narran. Al ver y escuchar ello, pienso, que sus paladares, no son simples paladares, tal vez acaso poseen, o estén dotados de algo así como, super tactos gustativos, creo que ni el dios de los paladares, pueda hacer la descripciones pormenorizadas y complejas que ellos logran arrancar a cada bocado evaluado y que una a una, o todas a la vez, sus papilas les van susurrando lo que van explorando, mientras disfrutan el convite . Me pregunto, si acaso en cada bocado que realizan, reflexionan, recapitulan, vuelven a evocar, comparar y buscar en su atlas personal de recuerdos, las imágenes, olores, texturas,